https://doi.org/10.61286/e-rms.v1i.33   

Ensayo

 

Epiteoría de la actitud: creer, saber, conocer

Pensar por abstracción, luego, existir en el actuar por potenciación

Epiteory of attitude: believe, know, know

Thinking by abstraction, then, existing by acting by empowerment

 

Próspero G., González Méndez 1  Sobres de correo, sobres de correo, sobre png | PNGEgg, Cesar O., León Guerra 2

 

1 Facultad de Educación. Universidad de Carabobo, Naguanagua, Venezuela.

2 Facultad de Ingeniería. Universidad de Carabobo, Naguanagua, Venezuela.

Resumen

El propósito es construir una epiteoría de la actitud y sus nexos conceptuales, con el creer, saber, conocer. En principio, se asume el compromiso epistemológico de explicar el conflicto religión-ciencia, haciendo una idea modelada del como: pensar por abstracción, luego, existir por un actuar en potenciación. Para la comprensión de lo intentado, se genera un agente operador: un tetraedro (poliedro regular), cuyos vértices son receptores conceptuales de una figura llamada nodo y que se identifican con los vocablos, creer, saber, conocer. Posteriormente, se exhibe una figura de representación cognitiva, un plano de Actitud Geométrica Mental. Se coordina, en cuadrantes analíticos, según la teoría cartesiana. El cierre lo constituyen las posibles relaciones que dan sentido a la epiteoría de la actitud: descubrimiento y hallazgo, disposición regular y metódica, percepción de sus conexiones y una conclusión justa. ¿Conclusión? ¿Derivación? La discusión e imaginación conclusivas se le dejan a usted, respetado lector.

Palabras clave: Epiteoría, Abstracción, Potenciación, Derivación.       

Abstract

The purpose is to build an epitheory of the attitude and its conceptual links, with believing, knowing, and knowing. In principle, the epistemological commitment to explain the religion-science conflict is assumed, making a modeled idea of how: to think by abstraction, then, to exist by acting in empowerment. To understand what was attempted, an operator agent is generated: a tetrahedron (regular polyhedron), whose vertices are conceptual receptors of a figure called a node and which are identified with the words believe, know, and know. Subsequently, a cognitive representation graph, a Mental Geometric Attitude plane, is exhibited. It is coordinated, in analytical quadrants, according to Cartesian theory. The closure is made up of the possible relationships that give meaning to the epitheory of the attitude: discovery and discovery, regular and systematic disposition, perception of its connections, and a fair conclusion. Conclusion? Derivation? The concluding discussion and imagination are left to you, respected reader.

Keywords: Epitheory, Abstraction, Potentiation, Derivation.

Recibido/Received

11-09-2023

Aprobado/Approved

15-12-2023

Publicado/Published

30-12-2023

 

Introducción                                                                       

E pur si muove (A pesar de todo se mueve). Antigua leyenda que narra que Galileo (1633) tras abjurar; alcanzó a murmurar esas palabras para sí mismo. Este hecho histórico en el que Galileo reniega y rechaza la herejía del movimiento de la tierra, es consecuencia de la teoría copernicana. En derivación, se conoce la posición del poder institucional, la iglesia, enfrentado al conocimiento, la ciencia. Emerge una disposición, posición, frente a un fenómeno natural. Surge una ACTITUD.

                En este ensayo se trata de construir una epiteoría de la actitud y sus nexos conceptuales, con el creer, saber, conocer. Su abordaje traumático se despliega siguiendo una sui géneris construcción. En un primer momento, se asume el compromiso epistemológico de explicar el conflicto religión-ciencia, haciendo una idea modelada del como: pensar por abstracción, luego, existir por un actuar en potenciación. Para facilitar la comprensión de lo intentado, se genera un agente operador: un tetraedro (poliedro regular), cuyos vértices son receptores conceptuales de una figura elipsoidal llamada nodo y que se identifican con los vocablos, creer, saber, conocer.

Por otra parte, se exhibe un gráfico de arrojada representación cognitiva, un plano de Actitud Geométrica Mental. En éste se coordinan, según la teoría cartesiana, cuadrantes analíticos que definen el comportamiento de las variables “x” e “y” resumidas en los llamados pares ordenados: (x, y). Los ejes cartesianos sirven de asiento ideal a la palabra objeto de la epiteoría: x=yo=actitud. La variable y=tú=creer, saber, conocer.

Esta disposición temeraria la permite la libertad del género ensayo, que, además, aprueba su redacción sin preciosismos sapienciales ni cientificismos académicos. Consideramos nuestro ensayo en dos segmentos. En el primero se abordan las condiciones generales para construir la razón fundamental del objeto de estudio. Se formula un interrogante que guía el discurso, acompañada de unas intenciones globales y particulares. Además, todo lo expuesto anteriormente. Y el segundo es la articulación elucubrativa, razonada y sistematizada de los contenidos esbozados en el primer tramo. Para un cierre lo constituye las posibles relaciones que dan sentido a la epitéoria de la actitud: descubrimiento y hallazgo, disposición regular y metódica, percepción de sus conexiones y una conclusión justa. ¿Conclusión? ¿Derivación?  El universo literario, humano, es de dimensiones inagotables. La discusión e imaginación conclusivas se le dejan a usted, respetado lector.

 

Epiteoría de la actitud: creer, saber, conocer. Pensar por abstracción, luego, existir en el actuar por potenciación

Una actitud, una orientación fuera de toda teoría particular, consiste en apartar la mirada de todo lo que es causa primera, primer principio, categoría supuesta necesidad, para dirigirla a los resultados, a las consecuencias.

    Pierce, S. (1839-1914)

 

Montaigne inventó el término “ensayo” para referirse a una prueba de su juicio con base en el estudio de uno mismo.

Bloom, H. (2004)

 

El trabajo filosófico – como en muchos aspectos sucede en la arquitectura – consiste, fundamentalmente en trabajar sobre uno mismo. En la propia comprensión. En la manera de ver las cosas. (Y en lo que uno exige de ellos).

     Wittgenstein, L. (2007)

 

Orden de composición o argumentos discursivos del ente de estudio

¿Abjurar? A pesar de todo se mueve (E pur si muove)

La historia de las grandes teorías de la humanidad exhibe narraciones que son de un interés e importancia trascendental. Si algo lucen de interés y relevancia, en cuanto a los contenidos, principios y fundamentos que estos encierran, se nota por el impacto social, cultural, político y económico que en todos los tiempos producen. De manera singular se observan los enfrentamientos entre los poderes religioso y científico. Tal es el caso que se trae a colación, la teoría del Sistema Solar de Ptolomeo y que sirve de introducción para comprender los cimientos descriptores de lo argüido como epiteoría de la actitud. Debe entenderse, no a costa de simplificarla, sino de complejizar la actitud. Así, en modo sucinto se expone la épica de Copérnico, la tragedia de Bruno y la abjuración de Galileo; enfrentados al conjuro del poder de la iglesia, la fuerza desarrollada y punitiva de la inquisición y al astrónomo compilador, Claudio Ptolomeo, cuyo halo de santidad fue tan grande, “que discutirle a él era discutir la misma Sagrada Biblia” (Trattner, 1945 p.18).

Ahora ¿de qué hipótesis se está hablando? De la teoría de Ptolomeo, conocida con el título de El Almagesto. ¿Cuál es su proposición? Plantea: “la tierra es el centro fijo del universo: el sol y la luna, las estrellas y los planetas se limitan a dar vueltas a su alrededor en el término de veinticuatro horas” (ob. cit. p.19). Vale decir que: la tierra no se mueve. Ante este caos, aparece, en el escenario de la ciencia de la astronomía el joven Copérnico. Consideró la posibilidad que “la tierra se moviese alrededor del sol, un punto de vista directamente opuesto a las enseñanzas aceptadas por la iglesia” (Trattner, p.23). La respuesta de la iglesia ante tan osado concepto revolucionario dejó constancia de su dogmática ACTITUD a través de la persona del sacerdote Diofeites. Era tanto su poder en la política de Atenas que hizo aprobar una ley que exigía “la inmediata persecución de todos los que no creyesen en la religión establecida o que mantuviesen teorías propias sobre ciertas cosas divinas”. (ob. cit. p.24). Copérnico fallece el 24 de mayo de 1543. Había sido traicionado por Andrea Oslander, un predicador interino. Aquel “cobarde, desatendiendo la prohibición explicita de Copérnico, había insertado en la obra un prefacio… que la teoría era simplemente una hipótesis interesante “. ¿Y luego qué? ¡Bruno!

Bruno, afirmó:

Todo lo que se hallaba implícito en la teoría de Copérnico a saber: que la tierra había sido desplazada como el centro del universo; que habiendo perdido la tierra su situación de centro, también lo había perdido el hombre: que la tierra no era el eje de un gran universo creado para sus habitantes, sino un pequeño planeta entre una infinidad de estrellas esparcidas en la inmensidad del espacio (Trattner, p.39).

               

Y en resumen, Copérnico afirmó: “el –heliocentrismo- (el sol como centro del universo) era la solución.  El antiguo sistema, el –geocentrismo- (la tierra como centro), se había hundido bajo el peso de sus propios epiciclos” (ob. cit. p.29).

El sustituir la tierra por el Sol (en metáfora) como centro de los movimientos planetarios, había fracturado en su esencia y dogma la “vanidad humana” y el poder de la iglesia. ¿Consecuencia? ¿Disposición? ¿Posición? Para Bruno, fue entregado por la iglesia a las autoridades seculares “para que fuese castigado con toda clemencia y sin efusión de sangre” (ob. cit. p.42). Que no pasaba de ser la “fórmula convencional” para que le quemaran en la hoguera. A tal afrenta e ignominiosa arrogancia del dogmático poder de la iglesia, Bruno, en firme disposición, soporta estoicamente las vejaciones y obstinada posición del santo oficio de la inquisición. Él, orgullosamente les hizo saber:

La victoria está en manos del destino. Sea lo que sea de mi, las futuras edades no me negarán por lo menos, sea quien sea el vencedor, que no temí a la muerte, que no cedí a ninguno de mis compañeros en constancia y que preferí una muerte valiente a una vida cobarde (Trattner, p.43).

Bruno, quien fue sentenciado y ejecutado por el santo oficio de la inquisición, dio paso a otro de los difusores de la teoría de Copérnico. Aquel maestro era Galileo Galilei. Con Galileo se tocó “muchas antiguas creencias fundadas en la tradición, en los rumores, en el dogma y en la interpretación errónea de la evidencia de la naturaleza” (ob. cit. p.43).

Galileo no escapó a la furia de las sensaciones subjetivas de la inquisición, por ser defensor de la teoría copernicana, y fue sometido a las torturas de ésta. Él, terminó por firmar una abjuración de todas sus afirmaciones:

Yo, Galileo Galilei, estando en mi septuagésimo año de edad – recitó de rodillas ante el tribunal-, teniendo ante mis ojos el Santo Evangelio, que toco con mis manos, abjuro, reniego y detesto el error y la herejía del movimiento de la tierra (Trattner, p.47).

En consecuencia, fue condenado a prisión por el resto de su vida. Un hecho curioso es la leyenda que registra que Galileo, al momento de hacer la confesión, murmuró: “E por se muove” (A pesar de todo se mueve).

En síntesis, de las ideas y hechos narrados, la doctrina copernicana había derrotado, en su época, el dogma y poder de la iglesia y a la teoría astronómica de Ptolomeo. La Biblia había sido arrojada al “limbo de las ideas gastadas”. Las persecuciones, imposiciones y creencias teológicas, no lograron quebrar la posición; convicción racional, espíritu revolucionario y mente creativa de los defensores y difusores de la teoría del astrónomo Copérnico. El resto y realidades de la historia astronómica, en la actualidad, es bien conocida.

Ahora, ¿de lo narrado hasta aquí, qué se puede inferir?

Grosso modo, se pueden conjeturar derivaciones discursivas de desafíos actitudinales entre el poder institucional y la incansable búsqueda del hombre en su afán inteligible de explicarse la naturaleza. Vale decir:

a)       El enfrentamiento entre la religión y la ciencia.

b)      El poder dogmático de la iglesia y el escéptico pensar de unos hombres de ciencia.

c)       La actitud punitiva de la institución teológica y la aferrada disposición, posición, de su brazo operador: la inquisición eclesiástica.

¿Y que hay en esencia en esta compulsación? Un modo que concierne al pensamiento: la contemplación (teoría) que deviene en una acción práctica, acto o conducta aprendida, experimental o social: una ACTITUD.

                Los prolegómenos o argumentos explicativos del antagonismo argüido entre, la teoría del sistema solar de Copérnico y el poder teológico de la iglesia, sirven de marco referencial, para dar cabida a una singular discusión de un término o lexema que recoge la ansiedad de los protagonistas en ciernes. Quizás ¿experimentar con conceptos? ¿Hacer filosofía con palabras? ¿Uso del tropo de la catacresis y su sentido gramatical traslaticio? ¿Hurgar sin certeza o complejizar el significado de la locución ACTITUD? Estas interrogantes formuladas son una opción metodológica para explicar el leitmotiv de este ensayo; la epiteoría de la actitud. Ahora; ¿Qué entender por ACTITUD?

En definición de Pratt (2010), es:

Tendencia arraigada, adquirida o aprendida, a reaccionar en pro o en contra de algo o de alguien. Se evidencia en forma de conducta tanto de aproximación como de alejamiento y el objeto de la reacción adquiere, por consecuencia, un valor positivo o negativo, respectivamente, desde el punto de vista del sujeto. La actitud puede ser, en gran medida, latente, subjetiva, no expresada, o puede representar un grado cualquiera entre dos extremos. La actitud puede ser característica de una persona y, como tal, referida a la persona en cuestión, a otras personas, a grupos sociales, a la sociedad o al universo. La actitud puede ser social en cuanto característica de un grupo homogénico de personas (p.3).

Se advierte que, de acuerdo a la historia narrada, se pudiera estar en presencia de una conducta latente, subjetiva de grados extremos entre personas. A tal efecto, ¿será posible construir un modelo teórico como una actitud mental geométrica que viabilice en representación de cuadrantes cartesianos las distintas relaciones de posición y disposición del sujeto (personas involucradas), donde su inmanencia racional, su pensar por abstracción y su mónada espiritual se conjunten como razones críticas para la toma de decisiones? Acaso, ¿esas razones críticas pudieran ser fundamentos para el actuar por potenciación? A tal corpus interrogador, se le define en un texto gráfico heurístico o formulación de categorías modales actitudinales (Figura 1), como el que se muestra a continuación.

La figura 1 un arrojo singular, homérico, de los autores del presente ensayo. Es una inacabada idea-potencia de la presumible epiteoría de la actitud. Es un intento teórico de mostrar las posibles correspondencias semánticas entre categorías modales de ésta, y apreciar el alcance conceptual del término actitud con sus vecindades literarias del creer, saber, conocer.

 

Figura 1. Actitud mental geométrica

Fuente: Atlas Universal de Filosofía (2009).

 

Los conceptos epistémicos (o epiteóricos) fundamentales creer, saber, conocer se ciernen como insumos  literarios para articular, explicar, las razones que justifican las posiciones conductuales asumidas. ¿El porqué de semejantes disposiciones? Para ello se comienza por definir: creer. Para Villoro (2009):

El creer es un sentimiento o un acto de una actividad especifica que ocurre en la mente de un sujeto; por lo tanto, sólo es accesible a este sujeto; sólo él podrá percatarse de tener esa ocurrencia, porque sólo el tiene acceso a los datos de su propia conciencia (p.27).

La ocurrencia en la “mente de un sujeto” es factor primordial para considerar lo del pensar y de modo determinante o específico en lo concerniente al acto de proceder por abstracción; operar metódicamente clasificando por cuadrantes geométricos o caras poliédricas. La cita expuesta sirve para apuntalar el propósito o cometido de esta producción. ¿Y para creer hay que SABER? Este interrogante será objeto de revisión cognitiva y de su significado semántico en un metódico tetraedro relacional de la tríada ACTITUD-SABER-CREER a ser expuesto en un segundo segmento del corpus literario de este ensayo. - Si, pero ¿qué es SABER?-  “el más importante para el conocimiento es el que corresponde a la definición tradicional a “saber” que se remonta a Platón: “saber es tener una creencia verdadera y justificada” (ob. cit. p.127). Y agrega, en clara delimitación de su uso y sentido, que: “es el concepto epistémico aplicable a todo conocimiento justificado en razones, desde el saber del sentido común hasta el científico” (ob. cit. p.127).

El uso y sentido epistémico señalado en la cita anterior, serán los que sirvan de asiento explicativo a esta realidad literaria aquí intentada. - Es, en tal caso, el conocimiento científico, el que constituye el centro de atención y propósito de esta investigación. No obstante, por su reconocida validez intelectual, la Concordancia Bíblica, en el texto de sus libros, es fuente confiable, cuyos datos mostrados en sus contenidos pueden aportar elementos valiosos para la interpretación y comprensión del uso y contextualización del concepto, Saber. Saber sapiencial. A manera de ejemplo: “Demetrio goza de la estima de todos y también de la verdad; nosotros añadimos nuestro testimonio y sabes que es verdadero” (3 Juan 12). Relación, ¿saber-poder? Axioma ¿verdad justificada? Interpretación, ¿Todo ello es conocimiento? En progreso del discurso explicativo o desarrollo del conjunto finito de enunciados, se pregunta por: conocer.

¿Conocer?

Centrado en el espectro racional y potencial de Villoro (2009 ob. cit.), se entiende el concepto epistémico de conocer distinto del saber. Enuncia que:

Para conocer algo es preciso tener o haber tenido una experiencia personal y directa, haber estado en contacto, estar “familiarizado” con ello. … conozco un objeto que he visto, manejado o padecido, pero no conozco lo que no puedo contemplar o resentir de algún modo” (ob. cit. p.198).

Y, en síntesis, complementaria, Villoro agrega: “conocer no consiste en un solo acto, sino en muchas experiencias variadas, capaces de ser integradas en una unidad; por ello el conocimiento puede ser más o menos complejo, más o menos rico”. (ob. cit. p.199). ¿Y nuestras ideas? ¿Quién se ocupa de ellas? ¿Qué agregar del entendimiento humano? En ánimo racional y reflexivo, Locke (2005), alude:

Nuestro conocimiento se refiere a nuestras ideas… El conocimiento es la percepción del acuerdo o desacuerdo de dos ideas. Me parece, pues, que el conocimiento no es sino la percepción de la conexión y acuerdo, o del desacuerdo y repugnancia entre cualesquiera de nuestras ideas. En eso consiste exclusivamente. (p.523).

¿Qué tomar de especifico interés de la anterior alusión?

                La singular teoría de la “percepción del acuerdo o desacuerdo de dos ideas” ¿Por qué? porque en indiferente acto de confrontación de ideas, la actitud asumida estará supeditada a una de las posibles siguientes modalidades: deber-hacer, deber-ser, poder-ser/estar, poder-hacer; que en términos semánticos cartesianos resultan particulares pares ordenados para la interpretación de la conducta exhibida: [(deber, hacer), (deber, ser), (poder, ser/estar) (poder, hacer)]. Unas correspondencias coordenadas de un plano de actitud geométrica mental. Manifestación crítica del pensamiento. ¿Pensamiento?

La segunda consideración del título de este ensayo, presenta el modo posible de acercarse a la Epiteoría de la Actitud. La esencia de lo propuesto; resumida en el enunciado:

Pensar por abstracción, luego, existir por el actuar en potenciación

De sumo interés considerar los términos: abstracción, potenciación. Constituyen proposiciones semánticas en la construcción de lo eidético de lo aquí deseado. - ¿Qué significa pensar? Heidegger (2012), en arriesgado aforismo, afirma: “lo gravísimo de nuestra época grave es que todavía no pensamos” (p.11). Sin embargo, tal sentencia sirve de acotación a lo que se quiere plantear. No es intención de lo aquí mostrado darle una respuesta a esta pregunta. Es una alerta cognitiva al lector acucioso e interesado en conocer un algo más acerca de la interrogante. Solo se trata de cómo debe utilizarse para esbozar una epiteoría, en modo singular: la de la actitud. Aun así y para dar una clara idea de lo ¿Qué significa pensar?, y su alcance teórico, obsérvese la subsecuente tabla 1.

 

Tabla 1.  Pensar

Representantes

Teorías / perfiles

HERÁCLITO

Todos tienen el logos, pero solo los despiertos lo saben.

PARMÉNIDES

El ojo que no ve.

SÓCRATES

La importancia de saber que no se sabe.

PLATÓN

El conocimiento es un recuerdo.

CUSA

Elogio de la docta ignorancia.

DESCARTES

El método del buen razonamiento.

LOCKE

La mente no inventa ideas.

CONDILLAC

Imagina que eres una estatua.

KANT

En toda sensación hay un a priori.

HEGEL

Todo lo que llamamos finito no existe.

PEIRCE

Cómo establecemos nuestras creencias.

JAMES

El significado de una idea es su consecuencia

HUSSERL

Hagamos epojé. Pongamos el mundo entre paréntesis

Fuente: Atlas Universal de Filosofía (2009).

 

Manifestaciones reflexivas, de intensidad racional en un intento por explicar lo que ellos entienden, por ¿Qué significa pensar? La ACTITUD, como disposición anímica e intencional de estos teóricos, en un compromiso intelectual, con la humanidad, para fijar en el ser humano una opción posible de entender, comprender y explicarse su mundo y el mundo de su prójimo. - ¿Estas reflexivas digresiones se producen por abstracción? El término abstracción, por su acción y efecto de abstraer, es componente sustantivo en la construcción de esta trama discursiva y de su sustantividad cognitiva. ¿Cómo se entiende? ¿Genera hipótesis susceptibles de coherencia y verificación?

Abstracción en el proceso semiótico

El término actitud desde su construcción semántica presenta el sufijo ud, que alude desde allí, “su condición genérica o ideas abstractas”. Punto de referencia para argüir y formalizar; a) El significado de abstracción: “proceso mediante el cual se separan los elementos comunes de muchas cosas particulares” (Greimas 2006, p.9) b) De enunciar lo aceptado como “pensar por abstracción”, entendido éste como: “un modo de pensar que opera clasificando la realidad y los saberes sobre ellas en una sucesión de géneros y especies” (Lizcano. 1993, p.194). A los efectos del trato esencial de este ensayo, se “operará” por construcción de triadas en un plano singular geométrico cartesiano. Metódicamente una triangulación correspondida en permutación semántica de los términos: creer, saber, conocer; nodos componentes de la Epiteoría de la Actitud, en la disposición para comprender/explicar su pensar por abstracción, para existir, en un actuar por potenciación. ¿Qué significa actuar por potenciación?

Aristóteles (2000), dejó saber:

Las potencias pueden referirse a un mismo género; todas ellas son principios, y se ligan a un poder primero y único, el de cambio, que reside en otro ser en tanto que otro. La potencia de ser modificada es en el ser pasivo el principio de cambio, que es capaz de experimentar mediante la acción de otro ser en tanto que otro (p.212).

Las condiciones de conocer que las potencias están referidas a “un mismo género” y que “se ligan a un poder”, cimientan las posibilidades ciertas de activar y operar con los elementos creer, saber, conocer, articulados con el término actitud. En el modo de pensar aristotélico-euclídeo, se sustraen magnitudes como se abstrae el género de la especie. Para el caso de este ejercicio retórico escrito, interese la abstracción y potenciación aristotélica-aristotélica. ¿A qué se refiere? A modo de explicación, obsérvese el siguiente ejemplo:

Si de la especie “hombre” (= “animal racional”) abstraigo/sustraigo el género animal, queda como residuo o exceso la diferencia especifica: el ser “racional”. (ob. cit. p.197).  De manera esquemática se traduce:

Especie                                                         Género

Hombre                          =             Animal + Racional

Hombre – Animal         =             Racional

Especie – Género          =            Diferencia Especifica

Análogo procedimiento será empleado en la argumentación y explicación de la epiteoría de la Actitud: creer, saber, conocer y que se desarrollará en el segundo segmento del conjunto de definiciones finitas. (Corpus teórico) (Lizcano 1993, p.197).

¿Y de la articulación método, metodología y epiteoría?

Se hace acopio cognitivo o artificio heurístico, mediante el empleo de uno de los conocidos sólidos de Platón: el TETRAEDRO. ¿Cómo entenderlo? Un tetraedro tiene cuatro (04) vértices y cuatro (04) caras. En cada vértice se asentará un nodo con identificación de los elementos involucrados y que son objeto de estudio (actitud, creer, saber, conocer). La combinación de tres (03) vértices (o los nodos que los identifican), dan cabida a la formación de las distintas caras del tetraedro.

La exégesis racional de estos componentes, sus posibles derivaciones teóricas y sus lazos conceptuales, constituirán insumos fundantes para la argumentación epitéoria del vocablo ACTITUD. ¿Cómo sería su funcionamiento desde la estructura geométrica del tetraedro? Obsérvese la proposición estructural y enlaces nodales. Cara 1: Actitud –Saber-Conocer. Cara 2: Actitud-Creer-Saber. Cara 3: Actitud-Creer-Conocer. Cara 4: Creer-Saber-Conocer. De estos arreglos relacionales se espera construir las razones explicativas de la Epiteoría de la Actitud.

Le precede, a modo de prolegómenos, un estadio radiográfico etimológico de la voz, actitud. Una acotación y definición explicita de lo que constituye el pensar por abstracción y la posible manifestación actitudinal del actuar por potenciación. Con esta trama ¿A dónde nos conduce este discurso o arte preceptor? Deviene en la formulación del interrogante que servirá de guía para la producción del larvado ensayo. Así, se interroga: ¿Qué relación hay entre la actitud y el creer, saber, conocer?

La respuesta intentada, hipotéticamente a la pregunta objeto de estudio (POE), vectorizará en módulo (lo que se trata como un todo) dirección y sentido, la Epiteoría en cuestión.

Se expone lo que se tiene en perspectiva y que en singular mostración se enuncia como:

 

Construir un compendiado cuerpo teórico que explique la relación que hay entre la actitud y el creer, saber, conocer

En travesía epitéorica y para dar respuesta a la interrogante formulada como objeto de investigación se optará por transitar la vía del entendimiento o de la razón. Se tendrá en cuenta los grados de la misma (la razón): a) Descubrimiento y hallazgo de pruebas. b) Disposición regular y metódica de las mismas y de su arreglo en un orden claro y adecuado que permita advertir fácil y llanamente su conexión y su fuerza tramática. c) Derivar la conclusión justa. Un faltante eslabón cognitivo.

En refuerzo a la verosimilitud de lo intentado, se remitirá el discurso a la credibilidad de la Concordancia Bíblica. ¿Cómo? Hurgando en modo exegético, en el contenido de los textos sagrados que contengan la palabra actitud o en su excepción, en los sinónimos de ésta. A manera de representación se cita: Proverbios 16.1-2. Aparecen las palabras, conducta y disposición; sinónimos del vocablo: ACTITUD, observada en la tabla 2.

 

Tabla 2.  Concordancia bíblica

    LIBRO

TEXTO

¿EXÉGESIS?

·         Proverbios 16.1

 

 

·         Proverbios 16.2

·         Del hombre son las disposiciones del corazón más del señor es la respuesta de la lengua.

·         A uno le parece limpia su conducta, pero es el señor quien examina las conciencias.

·         Habla de situación de ánimo.

 

·         Acción, talante o disposición personal sometida al juicio divino.

 

¿Apología?

A manera de clausura, epílogo o colofón del ensayo logrado como producto epitéorica del término actitud (su naturaleza y esencia denotativa), se expondrá el construido cuerpo teórico, que desde la conjunción de una intuición intelectual y la concordancia factual; develan la relación que existe entre los elementos involucrados del “asunto” investigado.En síntesis, un ensayo de temeraria acepción o posible contenido de alcance tropológico: una catacresis. Un posible modo de geometrizar un concepto.

 

Articulación escrituraria y metódica de la actitud con los conexos explicativos: creer, saber, conocer

La idea central (leitmotiv) de esta realidad literaria es construir (¿inventar?) una conjetura. Una especie de inferencia singular sobre cuestiones de epistemología y semántica. Un tratamiento coherente del asunto que aquí aparece como subtítulo. Los juicios que se formen se obtendrán de las posibles señales o indicios que se toman de las estrategias cognitivas (caras) que a continuación se desarrollan. Se emplea la representación gráfica de un TETRAEDRO (Figura 2), como instrumento pedagógico compendiador de los conceptos (nodos), en estudio. Se exhibe su representación del siguiente modo:

 

Figura 2. Tetraedro epistémico

 

Metódicamente, se articulan los nodos de las diferentes caras (Figuras 3, 4, 5 y 6), así se tiene la cara 1 poliédrica.

 

Figura 2. Cara 1 poliédrica

                 

Cara 1: Actitud, Saber, Conocer

               En osado algoritmo semántico se conectan los nodos de la CARA 1, mediante la siguiente algebra.

Definimos: a) Actitud es el “todo” (universo) construido.

b) El saber, conocer; relacionados en sentido aritmético como: actitud (=saber, conocer); son elementos de ese conjunto. Esquemáticamente:

ACTITUD= saber + conocer (considerados de esencia homogénea por ser estados cognitivos inherentes al ser humano. Válido, de aquí en adelante, en toda la construcción, como discurso pedagógico). Asoman interesantes interrogantes si nos atrevemos a considerar:

               ACTITUD – SABER =? CONOCER Y

               ACTITUD – CONOCER =? SABER

Surgen todo tipo de especulaciones que pueden resultar muy interesantes sus estudios. En particular ¿de qué saber, conocer, depende el llegar a tener una ACTITUD APRENDIDA? El influjo de otra persona o poder (“actitud doctrinaria”) como respuesta a esa conducta.

Esquemáticamente: Modo geométrico mental: reducido.

(+,-) =? (yo+, tu-) =? (poder, no ser/estar) o, en otro sentido: (-,+) =? (yo-,tu+)=? (no poder, ser/estar).

¿Y de una ACTITUD social? Se identificaría como una conducta compatible, favorable a los intereses colectivos diferentes a los individuales.

Simbólicamente: Modo geométrico mental: ampliado generador.

(+,+) =? (yo+, tu+) =? (poder, ser/estar).

¿Y de la ACTITUD PROPIA? Pudiera considerarse la disposición, posición personal del sujeto ante las exigencias, compromisos o contingencias de vida a las que se pudiera ver sometido. - Puede incluir el caso simbólico:

Modo geométrico mental: ampliado no generador.

 (-,-) =? (yo-,tu-) =? (no poder, no ser/estar).                                                                                               

¿Y del saber, conocer? Dos conceptos epistémicos distintos. Sin duda, la ACTITUD habitual, consuetudinaria con la que el ser humano enfrenta la vida, pasa por el binomio: (saber, conocer). El “saber que se conoce” genera un “yo” creativo, emprendedor, libre, critico.

¿Y de la Concordancia Bíblica? Acción como sinónimo de ACTITUD expresada en la tabla 3.

 

Tabla 3.  Actitud

LIBRO

TEXTO

¿EXÉGESIS?

1. Samuel      2.3

 

 

 

No multipliquen discursos arrogantes, que la insolencia no les brote de la boca, porque el señor es un Dios que sabe, él es quien pesa las acciones.

“El soberbio siempre va a fracasar”.

Saber, conocer consolidan un discurso emancipador y pretendido alejamiento de la arrogancia.

                                                                                                                                                                                  

¿Qué estimaciones conceptuales se pudieran tener presente en cuanto a la relación saber/conocer? En honor a la verdad literaria, la magnitud de semejante conexión excede el sentido y alcance propuesto de la presente idea. Más si se establecen determinadas condiciones especulativas, pudiera darse el caso de posibles resultados cognitivos de marcado interés. ¡Especulemos!

Supongamos que Saber (S) es un conjunto formado por todos sus sinónimos y que, de manera análoga, tomaremos Conocer (C). Entonces, en lenguaje simbólico matemático, intentaremos su Intersección (∩). En un operar de teoría de conjuntos, tendríamos.

Saber (S) = sinónimos

Conocer (C) = sinónimos

La operación de la intersección en la teoría de conjuntos, será:

(S ∩ C) = {todas las palabras que sean sinónimos comunes a S y a C}.

Sinónimos de Saber (S)

 

 

Del conjunto (S∩C), se puede inferir, elucubrar, tramar, descubrir e inventar todo tipo de epitéorias. Además, de constructos lingüísticos que contribuyan en la composición de axiomas gramaticales que faciliten la formulación y acceso al sistema del conocimiento.

Para Santa Cruz (1992), el acceso al sistema del conocimiento se centra en el estudio de: El conocimiento como etiquetación abstractiva, el conocimiento como unión abstractiva, el conocimiento como igualación abstractiva, como analogía.

                                                              Concluye con la estructuración operativa del conocimiento.            Activa el acceso al sistema del conocimiento, mediante el uso de reglas. “la forma original de la cuarta regla del acceso es la siguiente:

CONOCER = “SER - ABSTRAIDO”

CONOCER U “SER - ABSTRAIDO” = UNIVERSO – COGNITIVO

                                UNIVERSO – COGNITIVO = CONOCER U “SER - ABSTRAIDO”. (P.50).

Una posible traducción nos llevaría a una situación del conocimiento como potenciación en el propósito del examen del concepto, ACTITUD. El mayor aprovechamiento de este algoritmo, radica en la condición cognitiva o procedimental de complejizar el objeto de estudio. La versión activa y pasiva del conocimiento.

Como término de este acceso al sistema de conocimiento, Santa Cruz (ob. cit), expresa que: “dos conocimientos son semejantes si poseen la misma forma y el mismo tamaño”. (p.85). Cuestión de averiguar ¿Qué significa forma y tamaño del conocimiento? Cabe la posibilidad de obtener una especie de “neutralización de la pasividad y la actividad cognitivas” (ob. cit. p.84)

¿se puede quebrantar la ACTITUD? ¿Es la ACTITUD una potencia pasiva?

Para Aristóteles (sf), “un ser tiene poder, ya porque tiene la potencia de modificarse a sí mismo, ya porque tiene la de modificar a otro ser” (p.212). ¿Existen la potencia pasiva y la activa? Sí. Y actúan por separado y a la vez. Una acción modificante y otra como agente modificador. ¿Puede pensarse que la ACTITUD es un conocimiento potencia, pasivo o activo?

Las potencias al igual que el pensar por abstracción están referidas a un mismo género, a un estado de especie homogeneizado. Finalmente, ¿todas las ciencias son potencias? Sí. Un modo de dar cuenta que hacer ciencia es convertir, ese reto sistematizado, del conocimiento, en una realidad racional.

 

Cara 2. Actitud, Creer, Saber

Los nodos ACTITUD, SABER, de la Cara 1, se conservan como principios explicativos que funden la triangulación Cara 2. Incorporamos al nuevo nodo el concepto: CREER.

¿Cómo definir CREER? Atendiendo a la “propuesta” de Villoro (ob. cit.), se resumen “ciertas condiciones para toda creencia”:

                S cree que p si y sólo si:

1) S está en un estado adquirido x de disposición a responder de determinada manera ante variadas circunstancias;

2) p ha sido aprehendido por S

3) p determina x.

De donde podríamos proponer la siguiente definición de –creencia-: “un estado disposicional adquirido, que causa un conjunto coherente de respuestas y que está determinado por un objeto o situación objetiva aprehendidos” (ob. cit. p.71).

La disposición, posición o estado anímico, particularmente, pertenece al sujeto. Lo inmanente es característica intrínseca al individuo. La condición [1], adquirida, puede ser sujeto de modificaciones de acuerdo al agente estimulador o promotor del cambio requerido. - La condición [2] en algún momento p fue aprehendido por determinada facultad de la mente: memoria, entendimiento, percepción. Un acto regido por la categoría epistémica posible/imposible. La condición [3]: ¿x es la disposición? ¿La posible conducta actitud/creencia?

El intentado plano singular cartesiano, actitud geométrica mental, para la relación epistémica actitud/creencia se expone en la figura 3.

Figura 3. Relación epistémica actitud/creencia

Fuente: Atlas Universal de Filosofía (2009).

¿Qué decir de creer y el término CERTEZA?

Porque todo el planteamiento de esta propuesta mantiene un alto porcentaje de lucubración  más que de evidencia, de verdad, está más próximo  al hecho de intentar hacer epitéoria con palabras, sin certeza, sin certidumbre. Es probable que la intención se parangone con lo conocido como una NOMENCLATURA. Vale decir, por definición de  Greimas (2006), “es el conjunto de términos biunívocos, forjados artificialmente o reducidos a la monosememia, que sirven para designar los objetos fabricados o los elementos de estos objetos” (p.285) ¿cómo relacionar la NOMENCLATURA con un Universo SEMÁNTICO notable, desacostumbrado? Intentamos esa correspondencia hipotética en modo del lenguaje simbólico.

¿Conceptografía?

        ACTITUD =? UNIVERSO COGNITIVO   

        CREER =? {Posible, imposible, necesidad}

        SABER =? {Hacer}

La algoritmización de la triada: ACTITUD, CREER, SABER; tratada según Santa Cruz (ob. cit.), para explicar el pensar por abstracción y actuar por potenciación, resultarían de una excedencia lógico-literaria que, seguramente, daría cabida a un marco hipotético de gruesa TESIS. ¿Y del lenguaje epiteórico de la Cartografía? Wittgenstein (2003), la define como: “el instrumento con el que analizamos el soporte de las inferencias, lo que, nos permite desnudar las expresiones lingüísticas dejando sólo sus contenidos conceptuales, haciendo más perspicua de este modo su lógica” (p.37).

En concordancia con lo así esgrimido, las potenciales inferencias, del concepto actitud y sus enlaces nocionales: creer, saber, conocer; aunado al plano de una disposición geométrica mental, requieren para su comprensión/explicación del mundo logicista de pensadores de la dimensión cognitiva de FREGE, RUSSELL, WITTGENSTEIN, entre otros.

 En síntesis, la CARA 2, es un punto de inflexión en la ACTITUD que de modo personal un ser humano puede abordar desde las creencias y el saber que se tenga sobre un objeto. Y si se consideran las CREENCIAS, religiosas, políticas o cualquier otra, generarán en ese sujeto, una conducta objetiva o subjetiva. Un conocimiento general que pudiera guiar la ACTITUD hacia ¿Una ética de la creencia? ¿Y de la Concordancia Bíblica, qué CREER?

Exponer el creer teológico resulta una experiencia de características dogmáticas. Si se piensa en el CREER, como análogo de FE, entonces, la secularización o adhesión al sujeto, le impone una magnitud a la ACTITUD, comprometida con la ponderación, el equilibrio o sindéresis en un actuar personal. En tanto el CREER se inspira en el concepto de FE, la ACTITUD, posible se manifieste con un esquema epiteórico probable/improbable. Admite una gradación. De esa forma escalonada de postura pudiera resultar un fundamento o principio social de la conocida escala de valores: correspondencia gradual de la DISPOSICIÓN, POSICIÓN, PENSAR, ACTUAR, (Por abstracción, por potenciación) de los seres humanos: ¿actitud típica? Como recurso gráfico explicativo y complementario, obsérvese el siguiente modelo. CREER: confiar, fe, fiar (información curiosa. El término creer, aparece 95 veces en los textos bíblicos) (Tabla 4).

 

Tabla 4. El termino creer

LIBRO

TEXTO

¿EXÉGESIS?

Juan 6.64

Pero hay alguno de ustedes que no creen. Desde el comienzo sabía Jesús quienes no creían y quién lo iba a traicionar.

¿Qué actitud prevalece cuando se traicionan las creencias? ¿Es un Judas social, político, ético?

            

El libro Juan y su texto 6.64 se tomó al azar ¿Cuánto CREE Ud. que cree? ¿Qué piensa? Todo lo anterior (Cara 2: actitud, creer, saber), plantea un problema de ACTITUD – CREER.

¿El creer dogmático y el creer escéptico? ¿Qué relación puede haber entre objetividad y subjetividad ACTITUDINAL? Interrogantes para hacer ejercicios de interpretación racional y de sustantividad cognitiva. ¿Y si estuviesen vinculadas al vocablo, CONOCER? Semejante triada resulta ser la formulada conceptual CARA 3.

Cara 3: Actitud, Creer, Conocer

La exposición explicativa de la articulación nocional de los nodos de la CARA 3, seguirá el mismo orden metodológico de las caras tetraédricas descritas anteriormente. La definición, de ACTITUD que se planteó en la CARA 1, la de conocer en la misma cara y la de CREER en la CARA 2. Con esta trama definicional, conceptual; quedaría por correlacionar: ACTITUD y las consecuencias del acto práctico o aplicado del binomio: CREER-CONOCER. Volvamos al arrojo escriturario y con el apoyo de la idea del álgebra de Santa Cruz (ob. cit.), recapitulemos, simbólicamente, el acceso al sistema del conocimiento. En la nombrada regla 4, plantea el conocer, como un conjunto universal, (ser-abstraído) y para este segmento lo haremos como:

ACTITUD =? CREER + CONOCER (*) (Actitud, creer, conocer del mismo género)

Si de manera perspicaz (¿atrevida?), establecemos operacionalmente las especulaciones conjeturales de transposición de términos, entonces, de la igualdad anterior (*), pudiéramos inferir:

ACTITUD – CREER = CONOCER. Un alcance algebraico (presunto), identificado con la operación matemática conocida como: Sustracción. En honesta manifestación, lo argüido es de una riqueza intelectual de exagerada y potencial búsqueda. El hecho de ensayar una operación numérica de esta naturaleza, es un compromiso cognitivo que exige del interesado, niveles de abstracción (mental); creatividad lógica – matemática y de especies conceptuales de magna comprensión en una: ACTITUD GEOMÉTRICA MENTAL. Su representación ideal se muestra en la figura 5.

 

Figura 3. Actitud geométrica mental

 

        Otro nodo o vértice de la trama tetraédrica resulta ser el CONOCER. Un punto de encuentro de aristas desde la Concordancia Bíblica expuesto en tabla 6.

 

Tabla 4. Conocer: concordancia bíblica

LIBRO

TEXTO

¿EXÉGESIS?

Proverbios 1.2

 

 

Para entender sabiduría y doctrina, para conocer razones prudentes.

¿Derecho humano a buscar la sabiduría?

¿Entender las razones para conocer?

       

¿Razones? Si hay algo que se deba estimar de rango respetable, en el libro Proverbios 1.2, es el hecho racional de poder considerársele como fuente confiable para argumentar razones desde el acto de conocer; el de sus fundamentos para elaborar un discurso de sistemática consistencia. Libre de incoherencias y con sentido en sus prudentes contenidos discursivos. Estas acotaciones pudieran inferir el interrogante ¿y dónde está la sabiduría?

La sabiduría se pudiera tomar como la instancia cognitiva de mayor alcance perspicaz a la que ser humano alguno aspire lograr en la aprehensión/comprensión de un objeto cualquiera. Es un acto en potencia. Es el conjunto “universo cognitivo” del creer, saber, conocer que, aunado a la actitud, moldean nuestro pensamiento y modo de actuar. ¿Y del canon literario?

 

Cara 4: Creer, Saber, Conocer

Esta cara tetraédrica, en la construcción de la epiteoría de la actitud, no involucra epistémicamente, a este vocablo (actitud). No quiere decir que tal ausencia sintáctica resta importancia al escenario intelectual aquí intentado. El dar cuenta objetiva de los elementos de esta cara tetraédrica, significa aportar fundamentos nocionales, conceptuales de las potenciales categorías por elaborar. Pudieran ser considerados, además, como fundamentos semióticos para la redacción de instancias metódicas, metodológicas, pedagógicas, modo de pensar o canon literario. Vale decir, por el contrario, que el entablar las relaciones conjeturales entre ellos (creer, saber, conocer), es una opción inteligente para la formulación de cualquier TEORÍA y en particular del estudio de una EPITEORÍA. - ¿Qué decir de ese estudio?

Colofón: clausura o respuesta a la pregunta objeto de Estudio (POE). Las posibles respuestas al objeto de investigación o de estudio están inmersas en las distintas caras tetraédricas intentadas. Su sentido contenido y significado, están desplegados a lo largo de toda la descripción/explicación de los diferentes nodos conceptuales. Los nexos teóricos relacionales se exhiben en los conjuntos singulares de: acceso al sistema del conocimiento, a la muy particular y osada, Actitud Geométrica Mental, a la válida fuente sapiencial de la Concordancia Bíblica. A los actos aristotélicos de pensar por abstracción y el actuar por potenciación. Además, la conjunción ecléctica reflexiva de los contenidos de las caras tetraédricas, dieron cimientos o principios fundamentales para responder a la interrogante que guio este documento literario. ¿Y en cuanto al compromiso objetual global?

Compromiso: decisión y vocación intelectual en la enunciación de un posible corpus epiteórico inferido del acto relacional de las caras tetraédricas. El realizable conjunto finito de enunciados y que puede ser objeto de un análisis de manera exhaustiva, adecuada y definida, por extensión, tiene los singulares elementos siguientes:

Descubrimiento y hallazgo

1.       El interés epistémico de saber si la actitud forma parte o no del mundo real y no del mundo psicológico o de ambos.

2.       La disposición determinada por hechos tal y como son aprehendidos por un sujeto, generan en él un modo de creer y una posible/imposible actitud.

3.       El plano ideal o de ACTITUD GEOMÉTRICA MENTAL, es un argumento metodológico para entender y practicar un ejercicio elucubrativo de las coordenadas conceptuales que se requieran distinguir según los cuadrantes cartesianos.

4.       El modelo tetraédrico, formado por nodos conjeturales y relacionados según las distintas caras de un tetraedro, facilitan la triangulación nocional, conceptual y categorial de las ideas objeto (ente) de investigación.

5.       El alcance hermenéutico de la Concordancia Bíblica como fuente de credibilidad en el uso semántico de las palabras: actitud, saber, creer, conocer y la inferencia exegética que de ellos se puede formalizar de manera semántica (sentido y comprensión).

Disposición regular y metódica

      Análisis o conjeturas hipotéticas.

      Posible que:

      CREER =? CONOCER

      CREER =? SABER + CONOCER

      Y probable comprobar o definir que:

      CONOCER – SABER = Ø

      CREER – SABER =? CONOCER (¿Dogmático?)

      CREER – CONOCER =SABER (¿Rebaño?)

¿O simplemente son formulaciones sin sentido lógico alguno? El mundo innovador es el correspondiente a mentes de manifiesta dicacidad

Percepción de sus conexiones

Semejantes captaciones y enlaces o nexos epiteóricos, dan cabida a una trama singular, resumida en los casos siguientes:

Casos:

·         Experimentar con conceptos.

·         Pensar sin certezas.

·         Uso del tropo catacresis como agente promotor lingüístico de nuevos conceptos.

·         Hacer epiteorías con palabras.

·         Geometrización de la Semántica.

·         Trama de una nomenclatura.

 

Asentimientos de libre albedrio, planteados por el autor del presente documento. ¿Amparado? En la libertad definicional que caracteriza a este género, conocido como: ensayo.

¿Conclusión justa? ¿Derivación ecuménica?

Para los años venideros, la cuestión de la ACTITUD se debería pensar como uno de los tópicos de la investigación socio-semiótica, en un contexto de interculturalidad humanística y globalizada

Agradecimientos

A nuestra Universidad de Carabobo.

Conflicto de intereses

No se reporta conflicto de intereses.

Referencias

Atlas Universal de Filosofía. (2009). Manual didáctico de autores, textos, escuelas y conceptos Filosóficos. OCEANO. https://dokumen.pub/qdownload/atlas-universal-de-filosofia-manual-didactico-de-autores-textos-escuelas-y-conceptos-filosoficos-9788449428234.html

De Gortari, E. (2000). Diccionario de la lógica. Plaza y Valdés, S.A. https://books.google.com.gt/books?id=J3iVh-vllPoC&printsec=frontcover#v=onepage&q&f=false

Espasa Calpe. (2012). Diccionario de Sinónimos y Antónimos. Espasa Calpe S.A. 1215 P. https://ele.chaco.gob.ar/pluginfile.php/512938/mod_resource/content/1/DICCIONARIO%20DE%20SIN%C3%93NIMOS%20Y%20ANT%C3%93NIMOS%20%E2%80%93%20Espasa.pdf

Greimas, A. J., & Courtés, J. (2006). Semiótica. Diccionario razonado de la teoría del Lenguaje. Gredos. file:///D:/Users/Admin/Downloads/5286-Texto%20del%20art%C3%ADculo-20325-1-10-20130404.pdf

Heidegger, M. (2012). ¿Qué significa pensar? Agebe. https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4895312.pdf

La Biblia de Nuestro Pueblo. (2007). Mensajero. https://oratiopura.files.wordpress.com/2017/06/la-biblia-de-nuestro-pueblo.pdf

Lizcano, E. (1993). Imaginario Colectivo y Creación Matemática. Gedisa. https://papers.uab.cat/article/view/v44-pericat/pdf-es

Locke, J. (2005). Ensayo sobre el entendimiento humano. Fondo de cultura económica. https://reddeindra.files.wordpress.com/2019/08/john-locke-ensayo-sobre-el-entendimiento-humano-fondo-de-cultura-econc3b3mica-2005-2.pdf

Pratt, H. (2010). Diccionario de sociología. Fondo de cultura económica.

Runes, D. (1985). Diccionario de filosofía. Grijalbo.

Trattner, E. (1945). Arquitectos de ideas. Ediciones LOZADA. https://sistemas.ceip.edu.uy/biblio/opac_css/index.php?lvl=author_see&id=34313

Villoro, L. (2009). Creer, saber, conocer. Siglo XXI. https://librosycultura2.files.wordpress.com/2018/03/villoro-2008-creer-saber-conocer.pdf

Wittgenstein, L. (2003). Tractatus lógico-philosophicus. Tecnos. https://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/2014/12/doctrina29684.pdf